Madrid, 16 de agosto de 2009
Regreso a Madrid. Vuelvo a esta ciudad a la que de lejos echo de menos aunque pase días maravillosos, a esta ciudad de alrededores correosos y maltrechos que me abraza en cuanto poso en ella mis pies. El maravilloso anonimato entre la multitud.
Arrastro la maleta y ni siquiera escucho cómo se deslizan sus ruedas, no oigo las voces que se cruzan y entrecortan, sólo veo labios que se mueven. Miro la pantalla: 4 minutos. Pasan y me siento. Mi cabeza se evade, me manda a algún lugar que no es otro que este mismo, éste en el que estoy, este Madrid condenadamente truhán que consigue atraparme con un guiño. Me siento en casa sobre los raíles subterráneos, siento que estoy en mi hábitat, innatural, pero mío.
Me gustaría poder definir cómo, de dónde, cuándo, cómo, por qué tiene ese aura que le baña, esa capacidad para envolverte pese a sus aglomeraciones hostiles, su ausencia de mar y su calor veraniego que todo el mundo soporta mientras le dice insoportable. Me gustaría poder explicar su magia, pero no puedo.
Y ahora aquí, sentada de nuevo en mi sofá, paladeo la seguridad y la certeza de las caricias que me son dadas al llegar a casa: calma. Respiro y vuelvo a ser una boca silenciosa, unas manos inquietas, un caminar pausado. Inhalo este aire caliente, cierro los ojos y por este Madrid donde no tengo miedo, sonrío. Calma, calma, calma. Irónicamente, calma.
~ 7 Caminantes: ~
at: 17 de agosto de 2009, 15:25 dijo...
Ahora sí... Espero poder dejarte mi primer comentario. Por fin!!! Después vuelvo y escribo en condiciones, como mereces. Por ahora, vale un saludito y la bienvenida a este rinconcito del 'barco pirata'. Besooooooos
at: 17 de agosto de 2009, 17:10 dijo...
at: 17 de agosto de 2009, 17:15 dijo...
Ey, me alegro que te guste lo que escribo y gracias por el enlace!
A mí me ha encantado tu blog.
Y la escena de Caótica Ana! Yo empecé Érase una vez el caos... bastante antes de verla, pero fue la primera película que vi en el cine en Madrid cuando me mudé aquí. Sí, yo me sentía muy como ella, una isleña en la capital... :-)
Veo, que estás empezando con el blog, está muy chulo así que ánimo y paciencia, que te lo dice una que lleva ya por la blogosfera unos cuántos añitos, y siempre hay épocas en las que apetece escribir y otras en las que cuesta más.
Un besito
at: 17 de agosto de 2009, 17:16 dijo...
jajaja, bueno, ya que vas a tener dos comentarios porque me he equivocado y pensé que el primero no se había enviado, mejor quédate con el segundo qeu decía más cosas, jaja, qué desastrillo que soy... :-)
at: 17 de agosto de 2009, 19:16 dijo...
Me quedo con el segundo ;) Un piacere, bella! Me encantó Corazas, por cierto..
at: 18 de agosto de 2009, 1:26 dijo...
Lo escuché una vez de Nueva York: la ciudad es un estado de ánimo. Madrid también lo es y tú lo llevas muy dentro.
Qué bueno leer tu blog, qué bueno es comprobar que la buena de Amelie lo visita y está enlazada. Y qué honor (y también qué vergüenza) ver que has enlazado a La sonrisa de Verdi. Si no te importa haré lo propio con el Camino a Macondo. Tus palabras y tus estados ánimo merecen la pena.
¡Un saludo!
at: 18 de agosto de 2009, 15:14 dijo...
Juampe, encantada de que me enlaces y de que aceptes mi enlace no consultado a tu Sonrisa. Seguiré salpicando esta página con estados de ánimo, estos tan contradictorios que experimento jeje Un beso
Publicar un comentario